Dormir sentada: ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Ventajas e inconvenientes?

Cuidado con dormir sentado
Como consecuencia de mantener un posicionamiento inadecuado podrías empezar a sufrir dolorosos problemas de espalda. Y no solo eso, si duermes sentado, las vértebras cervicales también se verán afectadas porque se comprimen ocasionando dolencias y molestias.

Haz que tu lugar para dormir sea más cómodo.
Pon una manta, almohada, cojín u otro material acolchado debajo de ti. Así darás apoyo a tu espalda. Enrolla una manta o toalla y colócala o pon una almohada pequeña detrás de ti en tu espalda baja. Así darás apoyo adicional a tu zona lumbar y reducirás el dolor.

Esto indica, de manera bastante evidente, que dormir en posición de semisentados puede reducir notablemente los índices de neumonía intrahospitalaria en pacientes de cuidados intensivos con ventilación mecánica y alimentación nasogástrica.

Dormir boca arriba es lo más recomendable ya que el peso del cuerpo queda repartido lo que previene el dolor de cuello y espalda. Además en esta postura se evita la formación de arrugas en el rostro. Si se coloca bajo las rodillas un almohadón se consigue una adecuada alineación de la espalda.